después de tanto llorar, y de morderme internamente... dejé salir ese nudito que hacía retorcer mis neuronas quitándome el sueño.
ojos pegajosos y labios partidos... sin mencionar lo partidito de mi corazón, por la partida de mi abuelo.
todo se concluye en lo acontecida que ando, y en las reflexiones de vida ante la muerte de un ser querido
no hay nada mas contradictorio que la debilidad humana frente al amor sintomático humano
Powered by Castpost
sábado, octubre 07, 2006
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
No hay comentarios.:
Publicar un comentario